
Aquella mañana estaba rodeada de árboles, arbusto y hierbas. También de lagos, mares, cascadas y sumideros naturales. De mariposas de mil colores, libélulas, y aves preciosas. Los peces nadaban y saltaban en las aguas, los reptiles correteaban por las piedras y una suave lluvia empezó a caer.
La imagen cambió bruscamente, ahora estaba en la cama con unas ganas increibles de llorar...todo había sido un sueño, una utopía cada vez más dificil de alcanzar.
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